- Filtraciones apuntalan candidatura de Lozano
- El tiempo corre en contra del senador
- Nora, va una vez más contra los hermanos Ortega
El día de ayer esta redacción cometió, un grave error. Durante la mañana, estuvimos recibiendo llamadas de distintas fuentes, confiables todas, que aseguraban que era cuestión de horas para que fuera nombrado Carlos Lozano como candidato del PRI a la gobernatura del estado.
Por una mala comunicación entre reporteros y coordinación, la filtración recibida que debió decir “se perfila Lozano como candidato del PRI”, y que se incluyó en una Purísima grilla especial en nuestro portal de Internet, por la trascendencia de la filtración, quedó como algunos lectores la recibieron en sus correos electrónicos, dando como ganador de la contienda interna a Lozano.
La intención era esa: señalar que filtraciones, principalmente provenientes del gobierno estatal y de actores de distintos partidos políticos, antagónicos todos, daban ya por un hecho que el senador con licencia sería el candidato.
Lamentamos profundamente este error de comunicación y pedimos una disculpa primero, a nuestros lectores, y en segundo lugar a los aspirantes del PRI.
Varios priístas se comunicaron con nosotros para explicarnos que, más bien, estas filtraciones eran producto de la presión que está ejerciendo Lozano a través de las redes de incondicionales que ha tendido en casi todos los partidos políticos y en el propio gobierno panista de Luis Armando Reynoso para generar una burbuja a su favor. La realidad es que la decisión del PRI no está muy alejada del senador Lozano, pero tampoco lo está de Lorena Martínez o de Gabriel Arellano.
De hecho, dicen los connotados priístas de Aguascalientes, aunque la tendencia actual de la cúpula podría favorecer al senador, por el intenso activismo que a últimas horas ha desatado Manlio Fabio Beltrones, el tiempo corre en su contra; y entre más se escuche a las voces del priísmo local, que están dispuestas a ir en unidad con Lorena Martínez, o con el propio Gabriel Arellano, más se le complica el panorama a Lozano.
Es de llamar la atención como grupos que parecían tener diferencias irreconciliables se están sumando a la lucha para equilibrar las venciditas priístas. Se está haciendo cada vez más frecuente ver en los eventos a ottistas con venturistas y lópezvillanuevistas, aunque no todos tienen gallo definido, lo que sí es un hecho es que están unidos contra Carlos Lozano.
Brincando del PRI al frente que están planeando PRD-PT y Convergencia, todo parece indicar que la carrera por la candidatura a la gubernatura está cerrada solamente entre dos personas: la perredista Nora Ruvalcaba y el convergente, Armando López Campa. La decisión podría estarse tomando hoy en la Ciudad de México y estaría en manos de Manuel Camacho Solís.
Sólo que López Campa tuvo que regresarse del Distrito Federal por una reunión que tuvo en Aguascalientes, al parecer, con miembros del PAN, mientras que Ruvalcaba se quedó en México para hablar con Camacho Solís, quien prometió venir en estos días para dar el anuncio de la candidatura.
Si las cosas se dieran favorables para la perredista, en un ánimo de equilibrar las candidaturas, se podría estar nombrando como candidato a la alcaldía a Vicente Pérez. Así, se daría pues la fórmula tan cacareada por ambos actores: “Nora gobernadora y Vicente presidente”.
En caso de que fuera a la inversa, la fórmula la encabezaría el “resta-votos” por encargo, López Campa, con el pupilo de la familia Ortega, Noé García, presidente del partido del Sol Azteca en la entidad.
Lo que al parecer estaría ya descartado sería una probable alianza entre el PRI y el PT, que de entrada, en Aguascalientes parecía no tener mucho futuro por lo poco que podría sumarle el PT al tricolor. De hecho, el PT parecería no sumarle mucho a ningún partido, incluida la diluida izquierda de Aguascalientes.
Y en el PAN, extrañó a los reporteros de la fuente, la sonrisa inusual que portaba el aspirante Raúl Cuadra en conferencia de prensa. Ahí Cuadra, como si fuera ya el ungido, estuvo haciendo llamados a la unidad del partido y lanzando votos de buena voluntad para que Martín Orozco salga bien librado de su problemilla con la justicia.
Y en el Congreso, mucha gracia causó la presentación de la “ley anti-chapulines” que presentó César Cervantes Mena. Y es que además de que esa reforma no ha sido aprobada en ningún lado, Cervantes Mena tampoco se ha acomodado con ninguna bancada (y tampoco es aprobado por ninguna).
Dejó Convergencia, se acercó al grupo parlamentario del PAN y luego manifestó su interés por añadirse a la del PRI. Ahora, se rumora, sigue en charlas con los tricolores.
P.D. El PRI en Aguascalientes podría estar viviendo el fenómeno Roberto Madrazo a su máxima expresión, eligiendo a un candidato que une a todos los grupos
pero en su contra.