- Educan con el ejemplo al crear empresa especial para éstos
Cuando un joven con alguna discapacidad intelectual termina su ciclo en la educación especial, se le concluyen las oportunidades, nulificando su proyecto de vida, ya que no existe una cultura empresarial de apoyo a este grupo de la población, negándoles un espacio para desarrollarse como seres humanos y ser económicamente activos, señaló Eva Muñoz Romero, directora de la microempresa “De todo para tu fiesta”, en la que laboran jóvenes con capacidades diferentes.
La señora Muñoz Romero cuenta que tomó conciencia de la falta de oportunidades laborales para los discapacitados, cuando su hijo José Manuel Ramos Muñoz, terminó la escuela especial y no sabía qué iba a hacer después, y al ver el panorama de puertas cerradas, decidió tomar la iniciativa y con apoyo del Sistema DIF Estatal, recibió apoyó para montar una pequeña empresa de banquetes, “Todo para su fiesta” en la que se contratará a jóvenes como José Manuel.
“Entendí que tenía que hacer algo no nada más por mi hijo sino por todos los jóvenes que no tienen un proyecto de vida, el proyecto de vida se llama trabajo, las personas cuando terminan de estudiar buscan trabajo, ellos terminan su escuela especial y no hay trabajo”.
Apunta que generalmente se tiene la percepción de que las personas con discapacidad son poco productivas y por eso no se les contrata en las empresas, sin embargo dijo, son gente muy comprometida, además en aquellas empresas en las que logran que los contraten duran solamente un mes o dos meses.
“Es gente muy trabajadora, mi hijo se burla de las personas que tienen vacaciones, dice –ahí tú tienes vacaciones pero yo estoy trabajando, porque él quiere estar trabajando” apunta a manera de anécdota.
“De todo para su fiesta” ya tiene operando nueve años y actualmente trabajan 18 personas con necesidades especiales, cuando los contratan para la organización de un evento los chicos hacen el pastel, las gelatinas, la comida y de manera regular, hace tortillas de harina, gorditas, empanadas, galletas. Trabajan de ocho de la mañana a una de la tarde.
La madre de José Manuel señala que su hijo tiene otro trabajo en Flextronics desde hace cinco años, la señora Muñoz Romero, indica que es una de las pocas empresas grandes que abre sus puertas a personas con discapacidad, refirió que ella conoce a otras dos pequeñas empresas que lo hacen, una que también se dedica a la preparación de alimentos y una más a la elaboración de trapeadores.
Finalmente la emprendedora, señala que hace falta que entre el empresariado y la propia sociedad, fomentar la cultura de integrar a los jóvenes con alguna discapacidad a la vida productiva de estado.