- Están en una edad de decisiones en educación, salud, sexualidad, ámbito laboral
- Debe reforzarse el sistema educativo para abrir posibilidades a este sector de la población
Los jóvenes y adolescentes deben ser en Aguascalientes un grupo de atención prioritaria principalmente las mujeres en lo que se refiere al aspecto de salud reproductiva pues un once por ciento de las adolescentes son madres y el 45 por ciento de las jóvenes, lo que implica en la mayoría de los casos, que se trunque o retarde las posibilidades de desarrollo personal.
De acuerdo a las cifras de la Comisión Estatal de Población (COESPO) en el 2009, había 220 mil 328 jóvenes, hombres y mujeres, entre 15 y 24 años de edad que aumentarán para el 2010 según la proyección en 3 mil 168 habitantes más que entrarán en este rango de edad. Las mujeres rebasan la cantidad de hombres en .4 por ciento, en el caso de los adolescentes que están entre los 15 y 19 años de edad y en 4.7 en los jóvenes que son de 20 a 24 años de edad.
Según la COESPO ambos rangos, deben ser atendidos de manera especial por las autoridades, tanto por las posibilidades como por los riesgos que corre, situación que incluso está circunscrito en el Programa Nacional de Población 2008-2010, donde se define a ambas edades como cruciales en la vida por la cantidad de decisiones que las personas toman en ellas relacionadas con la educación, la vida sexual y reproductiva, económica, en donde si no se toman los caminos adecuados las posibilidades de desarrollar el capital humano quedan truncas.
En términos de educación, de acuerdo a las cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) para el 2005, la población de 13 a 15 años de edad asistía en un 80.8 por ciento a la escuela, 79.9 para los hombres y 81.8 para las mujeres; de 16 a 19 años de edad la asistencia fue de 45.4 por ciento, 44.2 para los hombres y 46.6 para las mujeres y de 20 a 24 años de edad, el porcentaje disminuyó todavía más, a 21.2 por ciento, 22.6 para hombres y 20 para mujeres.
En estas proporciones estadísticas, se puede observar como hay una diferencia de 35.4 puntos porcentuales en la asistencia antes de los 19 años y después de cumplirlos hasta los 20 y disminuye todavía otros 24.2 puntos porcentuales para la población mayor de esta edad y hasta 24 años.
En el Programa operativo anual de población 2009, de la COESPO especifican que para octubre del 2005, la mitad de los adolescentes y 8 de cada 10 jóvenes no asistían a la escuela y uno de cada cinco jóvenes y adolescentes se encontraban en una situación de rezago educativo es decir que no cumplían con la secundaria terminada.
En cifras del Instituto de Educación de Aguascalientes (IEA) para el ciclo escolar 2008- 2009 se tiene una cobertura en el estado de 61.15 por ciento para los adolescentes entre 15 y 17 años de edad donde el 52.34 por ciento son mujeres.
En cuestiones de vida sexual y reproductiva, ya en repetidas ocasiones las organizaciones civiles relacionadas con estos temas han hecho denuncias relacionadas con la falta de una verdadera estructura educativa de la sexualidad que ayude a los jóvenes a ser responsables y principalmente a prevenir cualquier enfermedad o embarazo no deseado para quienes comienzan con una vida sexual activa. Esto se ve reflejado en el 35 por ciento de adolescentes y jóvenes que no tenían acceso a servicios de salud.
Lo que deja como consecuencia que el 11 por ciento de las adolescentes y el 45 por ciento de las jóvenes ejerzan ya la función de ser madres lo que las involucra en un ámbito de responsabilidades propias de los “adultos” lo que a su vez retarda y obstaculiza las posibilidades de desarrollo de las mujeres, en mayor medida que las de los hombres.
Con respeto a las cuestiones laborales, el 13.2 por ciento de los adolescentes forma parte de la tasa de desocupación y el 8.2 de los jóvenes se encuentran en esta misma situación.
En el Plan Nacional de Población se propone movilizar la mayor cantidad de recursos económicos para cubrir las necesidades de este grupo de edad, con la finalidad de crear un contexto con mayor equidad e igualdad social donde las oportunidades sean para los individuos de ambos sexos en estas edades y que a su vez esto les permita acceder cuando sean mayores a una vida más plena.