- Aunque en general aumentó el número de tianguistas en parte por el desempleo
- Por lo pronto les van a prestar los sábados un espacio en Los Arellano, el objetivo es reunir a 300 tianguistas
En algunos tianguis, con el inicio del año aumentó el número de personas que van comúnmente a buscar un lugar donde vender sus productos, pero se dejó ver mucho más entre quienes venden ropa, ya que incluso hay casos de personas de clase media o alta que prefieren ir a vender su ropa de segundo uso que anteriormente regalaban, esto es un claro reflejo de la forma en que la crisis ha afectado a las familias.
De inicio el líder de los tianguistas, Ricardo Macías Aguiñaga, secretario de la sección IV del sindicato de comerciantes y tianguistas de la CROC, dijo que era algo complejo definir por principio qué productos se habían venido en aumento porque muchas veces este espacio sirve para la compra venta entre los mismos que asisten y al final es complejo percibir quienes pudieron vender más, además de que hay giros muy específicos como la fruta y la verdura, pero fuera de ellos la mayor parte de los vendedores venden un poco de todo.
Al momento de poner un poco más de atención en el aumento de las ventas y los giros logra percibirse que efectivamente es la venta de ropa la que más ha predominado, incluso no sólo en el aumento de la venta sino también de la compra porque se ha dejado ver que muchas persona han optado por comprarse dos pantalones con el mismo dinero que anteriormente obtenían sólo uno.
Fuera de este rubro, en general, aumentó exageradamente el número de tianguistas porque muchas personas que anteriormente tenían un trabajo de oficina o en el sector obrero al ser despedidos se vieron en la necesidad de buscar un medio para obtener unos “pesos” que les sirvan para sostener a su familia y ahora lo hacen de una manera muy “digna” ha fácil de poder ocupar el tiempo y transformarlo en un ingreso.
En lo que se refiere a la relación de los tianguistas con las autoridades del área de mercados dijo que por el contrario han estado trabajando en un proyecto específico que es darle vida al área del arroyo de Los Arellano donde comúnmente se ponen los vendedores en la temporada de “muertitos”, la pretensión es utilizar el lugar los sábados de las 49 semanas de todo el año. A lo que se han dedicado hasta ahora es a buscar a las personas que puedan integrarse en este espacio, la meta es tener entre 250 ó 300 vendedores. El ofrecimiento de este espacio no es de forma permanente, sino de manera temporal.
Su objetivo principal para congregar a las personas que podrían ocupar este nuevo espacio son todas aquellas que en las madrugadas van a los tianguis ya existentes para ver si después de colocarse los vendedores de siempre quedan espacios libres, “vamos a tratar de recuperar a toda esa gente para que ya tenga un lugar más fijo”. Hasta ahora tienen ya reunidas 47 personas.
En este espacio de Los Arellano en tiempo de noviembre ocupan 800 espacios, por lo que ellos no piensan acapararlo todo, están conscientes de que quedará una buena cantidad de espacio libre para utilizar por otros grupos, el lugar no será exclusivo para ellos. Aunque no tienen una fecha precisa para tener reunidos a todos los comerciantes ellos esperan que les lleve entre 30 y 45 días, teniendo ya este lugar luego buscarán la posibilidad de estar en otros espacios, no de los que ya están ocupados, sino nuevos.