- Según datos, el éxodo de hombres y mujeres hacia Aguascalientes fue muy similar
- En el país se mueven en edades productivas o por el cambio de trabajo de los padres
En el registro de migración interna del Consejo Estatal de Población (COESPO), en una retrospectiva desde el año 1970 hasta el 2005, los niveles de migración en el primer año de referencia estaban alrededor del 7 por ciento, su punto más alto lo alcanzó en 1978 y fue bajando hasta el registro del 2005 que efectivamente estaba en el 4 por ciento. De acuerdo a las estadísticas, el primer municipio receptor es Jesús María con 38 por ciento, le sigue la capital con 31 por ciento y después San Francisco de los Romo con 21 por ciento, con esto abarca el 90 por ciento del total.
Las razones para cambiar de residencia de una ciudad a otra varían dependiendo de la necesidad de cada individuo, Ángela forma parte del 3.9 por ciento de mujeres que migraron a Aguascalientes, ella lo hizo desde que era niña por el trabajo de sus padres. La llegada no fue sencilla pues aunque los adultos trataron de convencerla de que todo sería nuevo, también fue consciente y el ambiente se lo hizo notar que estaba irrumpiendo.
De acuerdo a datos acotados en la página de internet del Instituto Nacional de las Mujeres, tomando como referencia el conteo del 2005, el promedio de migración a nivel nacional fue de 2.6 y 2.8, para mujeres y hombres respectivamente; en el caso de Aguascalientes estos registros fueron de 3.9 y 4 por ciento, que de acuerdo a datos del mismo Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el año 2005, hubo 36 mil 329 inmigrantes y 15 mil 387 emigrantes dando un saldo de 20 mil 942 nativas de otros estados pero que en ese momento residían ya en este estado.
En el año 2000, Aguascalientes era parte de las 14 entidades que ganaron población y tomando en consideración las cifras para el 2005, sin duda siguió en ese grupo aunque el nivel de inmigración disminuyó en 6 mil 110 personas que representan un 14.3 por ciento del total del año 2000.
Para el 2005, la lista de migración la encabezaba con ganancia en población Quintana Roo, Baja California Sur y Baja California; mientras que los tres estados que más hombres y mujeres perdieron de acuerdo a este registro fueron Tabasco, Sinaloa y el Distrito Federal.
El mayor porcentaje de migración está precisamente entre las edades, de 5 a 34 años de edad con una leve disminución en el rango de 10 a 14 años de edad; tanto para hombres como mujeres, de 15 a 19 años, las mujeres aventajan un poco en porcentaje a los hombres. Desde los 34 años de edad hasta las personas mayores de 65 disminuye ya significativamente los niveles de migración.
Cuando Ángela llegó a Aguascalientes tenía 13 años estaba en la secundaria, llegaron a inscribirla a segundo año con un grupo que había ya iniciado clases y al que le costó, a ella y a sus compañeros, adaptarse a esa nueva presencia. De acuerdo al registro del año 2005, el nivel promedio de escolaridad entre los migrantes avecinados en este estado es de 10.8 años en promedio, 11.1 para el registro masculino y 10.5 para el femenino. El promedio nacional es de 9.8 en general, 10 para los hombres y 9.5 para las mujeres.
De acuerdo a los datos del 2005, en cuestiones de migración las mujeres aventajan por un porcentaje mínimo a los hombres en la clasificación de sin escolaridad de un 3.3 para ellos y un 4.2 para ellas; también el porcentaje es mayor en primaria y en media superior; en media básica y superior o posgrado, es mayor la cantidad de hombres.
Ángela concluyó la universidad, ahora es parte de la Población Económicamente Activa e incluso se casó ya, después de 15 años de vivir en Aguascalientes no se siente originaria de este estado, pero tampoco del lugar donde nació, incluso ahora que ya es madre está pensando en emigrar a un estado que ella considere más favorable para su nueva familia.
