En tres años el número de camas censables en las instituciones de salud pública del estado apenas crecieron 6.75 por ciento, pasando de 800 camas en el 2004 a 854 en 2007, así lo deja ver información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Un incremento promedio de 18 camas por año.
En Aguascalientes el índice de disponibilidad de camas censables por mil habitantes en 2007 fue de 0.71, de acuerdo con información de la Secretaría de Salud, este indicador permite valorar la disponibilidad de camas para atender a la población de un lugar, en un periodo determinado, ya que en la cama instalada es el área de hospitalización donde el paciente es sometido a observación, diagnóstico, cuidado o tratamiento.
Destaca el Instituto de Salud del Estado (ISEA) como la única
institución que ha incrementado el número de camas disponibles, pasando
de 388 a 444 camas, de 2004 a 2007. La distribución de camas censales
en el estado entre las instituciones públicas se presenta de la
siguiente manera; el IMSS cuenta con 308, el DIF con 20 y el ISSSTE con
82, dos camas menos a las reportadas en el 2004; por su parte el IMSS y
el DIF, no han incrementado el número de camas disponibles en tres
años.
Cabe aclarar que 90 de las camas con las que cuenta, pertenecen al
hospital psiquiátrico Dr. Gustavo León Mojica García», que por su
función específica de subespecialidad no es considerada para el cálculo
de indicadores de camas disponibles.
Los datos del INEGI ponen de manifiesto la poca inversión en materia
de infraestructura de atención médica de segundo nivel, tanto en las
instituciones federales como el IMSS e ISSSTE y estatales como
hospitales del ISEA pues en los últimos cinco años no se han construido
nuevos hospitales que den atención a la población de Aguascalientes que
no puede pagar un hospital particular.
En Aguascalientes el 29 por ciento de los habitantes no tienen
seguridad social, por lo que asisten a los cinco hospitales civiles
bajo la administración estatal, que no han incrementando de manera
significativa su infraestructura hospitalaria, a pesar del tan sonado
nuevo Hospital Hidalgo, que anunciara durante su campaña a la
gubernatura, Luis Armando Reynoso Femat, al inicio y durante los cinco
años de gestión y que aún no ha sido concretado.
Leticia López Gómez, directora de Servicios de Salud del ISEA en
entrevista para La Jornada Aguascalientes señaló que en 2008 el ISEA
cerró la atención al 109 por ciento de ocupación hospitalaria, aunque
este porcentaje aseguró, puede fluctuar.
“Es decir hay pacientes que nunca llegan a ocupar un cuarto”, pero
aseveró que estos pacientes atendidos en los hospitales del ISEA no son
atendidos en los pasillos como en otras instituciones, sino que son
enfermos de corta estancia, como las mujeres que dan a luz y sólo
permanecen 10 ó 12 horas en el hospital sin ocupar una cama, pues
permanecen en la sala de expulsión y posteriormente en recuperación.
Dentro de la infraestructura hospitalaria, destaca que en
Aguascalientes sólo existen dos hospitales de tercer nivel – de alta
especialidad-, El hospital Dr. León Gustavo León Mojica de psiquiatría
y el hospital Miguel Hidalgo, ya que realiza cirugías complejas cono
trasplantes de riñón e intervenciones quirúrgicas de corazón.
En relación a la falta de personal que en repetidas ocasiones ha
denunciado el líder sindical de los trabajadores del ISEA,
Netzahualcóyotl Álvarez, a la que atribuye una disminución de la
calidad de la atención. López Gómez manifestó que es aún más urgente
subsanar el rezago hospitalario del estado con la construcción de nueva
infraestructura para desahogar el problema.
“Por cuestión de médicos no tenemos problemas realmente”, aunque
señaló que algunas especialidades son las que en determinados momentos
por la rotación del personal, hacen falta médicos de aéreas
especificas.
Los datos más recientes del INEGI, señalan que el ISEA cuenta con
488 médicos especialistas de los poco más de mil médicos que tiene
contratado el Instituto. A nivel general, entre todas las instituciones
públicas de salud hay un total de 994 médicos especialistas; es decir,
una disponibilidad de 0.9 médicos especialistas por cada mil pacientes
de instituciones públicas.