El nuevo objetivo del grupo Teatro del Ombligo es generar un sentido social mientras entretiene, para cubrir este objetivo les quedó como anillo al dedo el trabajo de Bertold Brecht que a pesar de que “La excepción y la regla” fue una historia escrita en el siglo pasado sabe a contemporáneo y se estrena en el patio Pons del centro cultural Los Arquitos.
Hubo dos hechos muy importantes que influyeron de manera
significativa para que Marcela Morán decidiera dirigir una obra como
esta, uno es que para ella siempre había sido un reto abordar el teatro
propuesto por Brecht que plantea su teatro desde tres sistemas, uno de
ellos es el distanciamiento del actor con su propio trabajo en escena
donde sí debe sentir, pero al mismo tiempo no; el otro es crear
conciencia en el espectador y finalmente entretenerlo.
Marcela calificó al teatro de Brecht como didáctico, pero no en el
sentido que lo concebimos ahora como un proceso de aprender
instrucciones, sino más bien como una toma de conciencia social, un
análisis de cómo se construye la sociedad.
El otro hecho que influyó para la existencia del montaje fue lo
ocurrido en nuestro país desde que llegó la “alternancia de poder”,
donde para Marcela en el primer período es como si no hubiéramos tenido
presidente y en este con sus debidos asegunes.
“Tenía ganas de montar este espectáculo para hacer una reflexión de
que ha pasado con nuestro sistema y todo en la obra es un juicio hacia
la verdad, cuál es la regla y cuál tendría que ser la excepción, si tú
quieres ser humano y portarte con humanidad serás la excepción, pero
eso no es la regla y lo que cuenta es la regla finalmente”.
La anécdota que cuenta la obra es fantástica, es la historia de un
comerciante, un cargador y un guía que viajan en una patrulla a través
del desierto en busca de un negocio de petróleo, el comerciante acaba
de comprar una concesión pero quiere que todo sea barato pues él está
acostumbrado a tratar mal a sus empleados, no les paga bien, no están
asegurados, no pertenecen a algún sindicato. Cuando el guía se entera
de todo esto se molesta, tiene una diferencia con el comerciante y lo
abandona en el desierto.
El comerciante decide continuar sólo con el cargador que no sabe el
camino para llegar al lugar a donde van, finalmente hay un asesinato en
la historia y el objetivo de la obra es hacer pensar, quién tiene la
razón, el pobre o el rico, el temeroso por el poder o el temeroso por
el trabajo; en buena parte de esa reflexión se ve el conflicto actual
del país.
La obra está aderezada con juego, en momentos vive el actor, luego
llega el personaje y también hay momentos en que el mensaje se trasmite
a través del canto, pues Brecht consideraba que era una forma más
adecuada de llegar al subconsciente del espectador.
Participan siete actores, la música creada especialmente para la obra será en vivo interpretada por el grupo La Bubba.
La parte más complicada del proceso fue ensamblar música y
actuación; en primera instancia Marcela trabajó por ocho meses con los
músicos y tres meses más en conjunción con los actores; en el caso de
la actuación el trabajo fue más sencillo porque fue un proceso
distante, juguetón y poco detallado.
En la temporada habrá funciones jueves, viernes, sábado y domingo
durante el mes próximo, de jueves a sábado se presentan a las ocho y
media y los domingos a las siete. El costo de la entrada 50 pesos.