Jaime Humberto Medina Guzmán, procurador de la defensa del menor del DIF estatal señaló que en los 10 meses del 2009 se han realizado 92 denuncias en la dependencia, de las cuales 41 son por lesiones dolosas calificadas en el seno del hogar, apuntó que la mayoría de estas denuncias son en contra de mujeres y en menor medida contra menores.
Señaló que la actuación del DIF consiste en que además de presentar la denuncia, se brinda apoyo por parte del área de trabajo social para ver cuáles son las necesidades, además se da asesoría jurídica y ayuda para presentar una demanda de divorcio o de alimentos si fuera el caso, “tratamos de proteger los derechos de los menores y de las mujeres”.
Sobre el resto de las denuncias precisó que 16 son por violencia
familiar, 5 por violación, 2 por violación equiparada, 10 por
atentados al pudor, tráfico de menores 1, sustracción de menores 3,
hostigamiento sexual 1, estupro 2, corrupción de menores 2, lesiones y
daños a las cosas 2, hechos punibles 5.
Medina Guzmán comentó que cuando se presenta una denuncia ante el
DIF y por la situación se pone en riesgo la integridad física o moral
de la mujer o niño, la dependencia está obligada a presentar una
denuncia el ministerio público adjunto al DIF, “nosotros presentamos
las denuncias, coadyuvamos con ellos dando los elementos que tengamos,
pero son ellos los que le dan el seguimiento respectivo”.
Cuando son menores los afectados por algún abuso, el DIF lo separa
de forma temporal del seno familiar. El procurador de la defensa del
menor señaló que actualmente hay 34 infantes bajo su tutela cifra que
se ha reducido en el último mes “se ha ido resolviendo su situación
jurídica y se han ido en adopción o se reintegran a su familias según
los casos”.
Apuntó que durante el tiempo que los niños permanecen en el albergue
de Casa DIF, se les proporciona atención psicológica para que puedan
superar de la mejor manera la situación traumática que vivieron en sus
hogares.
Explicó que antes de definir si el menor se reintegra a su casa los
padres tienen que pasar por el departamento de sicología y cuando ellos
determinen que son aptos pueden recibir de nuevo al niño en casa, con
supervisión ocasional del DIF para constatar que las condiciones en las
que vive son las adecuadas.
En el caso de que los padres no puedan hacerse cargo de los menores
por resultar peligroso para el menor, se intenta que regresen con
algún familiar que se responsabilice de ellos, de no ser posible se
pelea por la patria potestad de los infantes para que puedan ser dados
en adopción.
Apuntó que existen madres que solapan a sus esposos cuando abusan de
sus hijos, siendo esta una de las razones para que los menores no
regresen a sus domicilios, “muchas veces la mamá apoya al papá,
desafortunadamente muchas veces se ha dado esto y entonces no es
posible regresarlos al núcleo familiar”.