Retomando las palabras de un querido y valioso amigo, yo también quiero escribir acerca de las cosas que nos preocupan, que tememos, que deseamos y que admiramos: las mismas cosas de las que se habla en la cotidianeidad, en el mundo real. Por eso, inicia esta conversación con el lector aunque a manera de cuento digamos que medio para atenuar. Había una vez hace muchos años un 14 de septiembre de 1847, donde Estados Unidos colocó en el zócalo metropolitano la bandera de ese país. Los Niños Héroes pelearon contra el ejército y los marines de EUA y la heroica defensa de Churubusco el 20 de agosto de 1847 que hicieron los valientes soldados mexicanos, (ridículamente al mando del General Anaya), contra el ataque del ejército norteamericano, no sirvió de nada y así perdimos la mitad del territorio.
Hoy en esa histórica plaza de Churubusco en el DF, se ostenta “orgulloso” el museo de la intervenciones del siglo XIX y parte del XX (que incluye la Intervención Francesa de 1838-1839, Intervención Norteamericana de 1846-1848; Segunda Intervención Francesa de 1862-1867; Intervención Norteamericana de 1914 y la Expedición Punitiva por parte de los Estados Unidos en 1916).
Pero regresemos a la historia, perdimos la mitad del territorio por un pretexto. El motivo fue una invasión, (como la de Irak), pero aquí por el robo mas grande de territorio de un país en la historia de la humanidad…. EUA mutiló a México, independientemente de lo estúpido que fue Santa Ana, en una guerra que duró dos años, hasta que nos humillaron entrando al DF el 14 de septiembre de 1847, colocando su bandera en nuestras narices un día antes del festejo de la independencia.
Y recordando nuestra clase de primaria ¿o prepa en la actualidad?, sabemos que la Intervención Estadounidense en México, fue un conflicto armado que se inició por las pretensiones expansionistas (y súper eficientes) de la abusiva nación americana, cuyo primer paso fue la creación de la República de Texas —a la que el “Gobierno Mexicano” (sin nombres y apellidos ya por tradición) consideraba un territorio rebelde que podía reconquistar—, así como la demanda de indemnización al gobierno mexicano por los daños causados en Tejas, durante la guerra de independencia de ese antiguo territorio, útil para el logro de los intereses estadounidenses en adquirir los territorios de Alta California y Nuevo México, fueron los motivos que provocaron la invasión del territorio de la república Mexicana por parte del ejército estadounidense.
El pretexto fue la -BATALLA DE LA ANGOSTURA- donde unos cuantos soldados mexicanos, (dirigidos desde Matamoros por el General Pedro Ampudia), tuvo un choque contra una fuerza norteamericana entre los ríos Nueces y Bravo, un territorio que tradicionalmente no se consideraba de Texas, sino de Tamaulipas, México…. ¿Quién podía decir quién invadía a quién?. La respuesta dependía del punto de vista o del más fuerte como suele suceder y así los norteamericanos consideraron que los soldados de México habían violado lo que estimaban como suelo propio, debido a que el congreso de su país había decretado por sí mismo que Texas llegaba hasta el Río Bravo, (como pudo haber dicho que llegaba hasta Panamá o hasta donde ellos hubieran querido). Este incidente, reparable por la vía diplomática (en teoría), se convirtió en una acusación ante el mundo entero que decía: «México ha cruzado la frontera de Estados Unidos invadiendo nuestro territorio, por lo que con ésta fecha 13 de mayo de 1846, se declara la guerra a este país. «
La Batalla de la Angostura, exigió al gobierno mexicano además del territorio texano, los estados colindantes con el mar, lo que originó el ataque al Puerto de Veracruz y México debilitado por sus luchas internas de política (igual que ahora), tuvo que soportar el desembarco de las tropas invasoras el 9 de marzo de 1847 mismas que avanzaron hacia la capital. El resultado de todo esto fue que los territorios de Nuevo México, Alta California, Baja California y los Estados de Coahuila, Veracruz, Puebla y el Estado de México; fueron ocupados. Y a los puertos marítimos de otros Estados, se les aplicó un bloqueo naval.
El Ejército Mexicano (que por cierto estaba al mando del General Antonio López de Santa Anna hasta la final ocupación de la capital de la República) se rindió y para dar término a las acciones bélicas, Santa Anna firmó el Tratado de Guadalupe Hidalgo donde México (Santa Anna a nombre de todos) reconoció la independencia de la República de Texas, fijaba la frontera de ese estado en el río Bravo (así como EUA había soñado y planeado) y aceptaba la “venta” de los territorios de Alta California y Nuevo México a Estados Unidos a cambio de quince millones de pesos
Y ¿que se puede leer en Google al respecto?, pues que la batalla librada con el ejército norteamericano fue muy desigual, tanto por la preparación técnica como la falta de efectivo económico que padecía el gobierno mexicano (sin mencionar detallitos como que Santa Ana, había sido un déspota y abusivo con su pueblo y había incrementado los impuestos hasta por poseer ventanas en las casas; ni tampoco se menciona que nunca se supo en donde estaba invertido ese dinero recaudado tan honesta y eficientemente, ¿sería para los pobres más pobres?). Y también Google menciona que el clero (como siempre) hizo diversos préstamos en efectivo para poder sostener parte de esta guerra, donde de todos modos (a pesar de sus plegarias), se perdió la mitad del territorio nacional.
También google informa que – A pesar de que México perdió la mitad de su territorio a manos del imperialismo estadounidense, hombres de esta nación, mostraron valentía y nunca agacharán la cabeza ante nadie -… aunque quizás sí ante sus eternos gobernantes que aplican sus criterios en base a una incógnita disfrazada de virus o pobreza según sea el caso, perdiendo ya no al territorio sino al ahora “encumbradísimo tesoro nacional llamado capital humano” o “bono demográfico” quien en concreto se trata de mujeres y hombres que trabajan sin dignidad de salario, ni mucho menos de prestaciones pero que eso sí, ven el descuento puntual de los impuestos pertinentes mensualmente en su estado de cuenta .(Esta desbandada… continuará).
El pretexto del inicio de la guerra fue un choque entre ambos ejércitos (Abr, 1846) en el rancho de “carricitos” entonces parte integrante del Estado de Tamaulipas, Precisamente a la ribera norte del Bravo, Actualmente próximo a Brownsville, y por lo tanto territorio Texano hoy, resultando vencedor el general torrejon. La batalla de “la angostura” (o de buena vista según los EUA) , sitio cercano a Saltillo, se dio posteriormente a este hecho (Febrero 1847) cuando ya el ejército norteamericano llevaba un buen avance en su invasión, a cargo del general Taylor, fue un sangriento choque para ambos bandos, terminando en la disolución del ejército de este último, y en consecuencia su avance por el norte del País; Y por su parte, el retiro de las fuerzas Mexicanas comandadas por Santa Anna, (No por Ampudia, que fue uno de los generales participantes), con el pretexto de disolver la “rebelión de los polkos” iniciada en la capital del país. Fue una guerra dispar por la capacidad tecnológica militar, y el liderazgo de ambas partes. La derrota costó a México la mitad del territorio, y miles de muertes -sobretodo civiles- A los Estados Unidos, una guerra que permanece como la de mayores bajas militares en proporción de las tropas movilizadas, después de su propia guerra civil, a la que muchos de sus historiadores consideran una extensión de la guerra con México, por las consecuencias políticas y económicas de la anexión de territorios . Varios personajes Norteamericanos han calificado esta guerra como Injusta e Ilegal, entre otros Abraham Lincoln, y el propio General Ulysses S Grant. por nuestra parte una cicatriz que permanece abierta, a pesar de los años transcurridos.