Como una “buena ocurrencia” de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) calificó el paquete respuesta para el 2010, el director del Centro de Investigación y Desarrollo Empresarial (CIDE), Alberto Aldape Barrios, quien también aseguró que el pretendido impuesto al consumo no será aprobado en la cámara baja.
Confiado señaló que el 2 por ciento quedará solo en el paquete económico del gobierno federal porque el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) sumados en la cámara baja llegan a ser una mayoría que no votaría a favor por sus compromisos de campaña y plataforma legislativa.
Sin embargo, en caso de poder llegar a una negociación entre las diversas bancadas, dijo que el gravamen dejaría un escenario preocupante en el que se incrementaría el número de pobres y pasará de una pobreza patrimonial a una alimentaria.
El impuesto tiene sólo como virtud el hecho de que se conoce su destino, que se supone es el ataque a la pobreza, a diferencia “de todos los demás que no sabemos en qué se gastan. El problema es que en estos momentos el consumo esta contraído, meterle un 2 por ciento más, es encarecer todos los bienes de consumo y le van a pegar a la inflación”.
Para poder sostener la economía mexicana es necesario dejar de depender de los recursos petroleros, “eso no quiere decir que tengamos que irnos por el lado de gravar alimentos y medicinas o incrementar impuestos sobre todo en un momento de contracción económica”. La propuesta entonces deberá de estar encaminada una reforma hacendaria completa que dependa más de los impuestos permanentes.
Estos gravámenes se refieren al Impuesto Sobre la Renta (ISR) el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y otros que no dependen de la cotización del crudo o del dólar. Dijo entender la urgencia del gobierno por recuperar sus finanzas públicas pero subrayó que en el paquete se encuentran puntos desfavorables como es el 2 por ciento al consumo y el 4 por ciento de gravamen a las telecomunicaciones.
En este último punto, indicó que es “ir contra corriente de los países que buscan comunicaciones competitivas”, lo que repercutirá de manera global, al ser menos competitivos ya que se tendrá menor acceso a estos servicios.
Cuestionó también el quitar los subsidios a la gasolina aunque éste no es el mejor momento, ejemplificando en que quien consume el hidrocarburo cuenta con un modo de vida más alto que aquellos inscritos en el programa oportunidades, “es mucho mejor destinar los subsidios al programa que a la gasolina”, enfatizando en que este tipo de susidios hay que reenfocarlos.
Entre las viabilidades que mencionó con las que cuenta el proyecto de presupuesto se encuentra el incremento del 2 por ciento al ISR, el mantener el Impuesto sobre Depósitos en Efectivo (IDE), mientras que en otros puntos tendrá que analizarse el aumento de 2 ó 3 puntos porcentuales de gravamen.
“La tarea de los diputados federales va muy en serio hacia que país queremos, va mas allá del país 2010”.