Los recortes presupuestales en la cultura afectaron las jornadas laborales de los trabajadores en los centros culturales y se vio también la necesidad de reestructurar algunas actividades previstas para el resto del año, aun con la expectativa de cómo entrará el 2010 que, de acuerdo al panorama federal, no parece nada alentador, comentó Guillermo Cebreros, director del Centro Cultural Los Arquitos.
La semana pasada los jóvenes de la doceava generación de egresados de la carrera de técnico en Actuación de Los Arquitos vio en riesgo las funciones de su montaje de graduación debido a que el Instituto Cultural de Aguascalientes (ICA) se declaró imposibilitado a pagar horas extras a los técnicos que comúnmente los apoyan para cuestiones de sonido e iluminación.
Afortunadamente encontraron una forma de negociar y dijo Cebreros ya
se propusieron formas alternativas para soliviantar este mal trance de
“vacas flacas” es necesario que los empleados sean solidarios y asuman
una parte de la responsabilidad cuidando su trabajo y colaborando.
La medida que tomaron en lugar de hacer el pago de horas extras y
para no prescindir del apoyo técnico, fue aplicar una alternativa que
ellos llaman tiempo por tiempo, y que consiste en que si un trabajador
labora fuera de su horario se lo cambian por tiempo de descanso: “en
muchos casos esto ha podido funcionar sobre todo con personal de
mantenimiento y limpieza cuando hay eventos que se generan fuera del
horario de la jornada normal”.
Otro de los problemas que los jóvenes manifestaron fue el notorio
recorte del presupuesto con el que contaron para el montaje como cierre
de generación, aunque Guillermo Cebreros dijo que el recorte no es en
realidad una novedad, ya que generalmente el dinero asignado se ve
afectado por las fluctuaciones de los presupuestos aún sin crisis y eso
es algo que el productor debe tener previsto, aunque también reconoció
que en esta ocasión el recorte fue más severo.
El instituto en general fue muy cuidadoso al revisar todos los
detalles de los procesos que comúnmente realizan en cada uno de los
centros, están buscando la forma de que no haya gastos fuera de lo
posible y en este caso contemplaron las horas extras de los
trabajadores y cualquier jornada extra guardias se limitaron con la
finalidad de enfocar estos recursos a lo esencial.
“No se tiene la facilidad, ni la fluidez con la que antes se podía
disponer del personal para hacer una guardia o un tiempo extra, esta es
una de las partes que se ven afectadas de inmediato”.
Afortunadamente en cuanto a actividades, al menos en Los Arquitos no
tuvieron que recortar actividades de las que tenían programadas para el
resto del año, sino más bien hicieron una reubicación de fondos para
precisamente evitar dejar de lado lo esencial y aprovechar recursos de
todos los fondos a los que se tenga acceso.
Cebreros aseguró que Los Arquitos ha ido especificando su oferta
educativa que en su gran mayoría es la población infantil, entonces hay
manera de encaminar algunas de las acciones del centro cultural como
fomento a la cultura para los niños y las niñas; como ejemplo habló del
Altar de Muertos y las actividades realizadas alrededor de esta
ceremonia, que está todavía pendiente para noviembre próximo y que
estará dedicada a los pequeños.
Guillermo dijo que él quisiera ser optimista ante la llegada del año
entrante, sin embargo ante el panorama nacional y las previsiones de
los expertos no parece que un escenario muy alegre, no obstante, habrá
ventajas como aprender a convivir con presupuestos cortos y, si
aparecen excedentes, poder aprovecharlos de la mejor manera.