Tener un empleo seguro y con una remuneración digna para mantener una familia no es fácil de conseguir en El Llano y menos cuando son mujeres quienes lo buscan, a lo que se ven obligadas, ya sea porque su pareja no provee o porque el dinero que lleva no alcanza para las necesidades básicas. Es por eso que las autoridades están buscando la forma de abrir otras alternativas, comentó Salvador Martín del Campo, presidente de este municipio.
El año pasado, en el municipio de El Llano se realizó un diagnóstico con apoyo de varias dependencias; mediante él obtuvieron resultados que les revelaron datos importantes sobre el comportamiento de la población femenina.
Por ejemplo, que ellas son jefas de familia aún cuando está presente la figura masculina, pero ellas son las responsables del cuidado del hogar, la manutención, el seguimiento de los estudios de los hijos. Un menor porcentaje de mujeres tiene un ingreso propio, hay un alto nivel de depresión en las mujeres por la presión a la que se ven sometidas con las múltiples responsabilidades que tienen para cumplir y, en algunos casos, acuden al consumo de bebidas alcohólicas o drogas, para ayudarse a sobrellevar la situación.
“Si las mujeres son el eje de la vida familiar, también lo son de la vida social y por eso cualquier situación que las afecte a ellas perjudica de manera directa a toda la sociedad”, comentó el alcalde.
Según los resultados del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), todos los municipios de Aguascalientes tienen un grado muy bajo de rezago social aunque, en comparación a nivel interno del estado, El Llano está entre los primeros cinco municipios que registran mayor pobreza patrimonial y es el segundo municipio, después de Calvillo, con el nivel más alto de analfabetismo en personas de 15 años de edad y más.
Según comentó Martín del Campo, las oportunidades laborales en El Llano son limitadas en general y la vocación de trabajo está enfocada en las actividades agropecuarias, por lo que están apostando por la forma de conseguir créditos y apoyos para crear empresas productivas de agricultura tecnificada, como invernaderos, y que estén a cargo de las mujeres en el municipio.
De hecho, dijo, en estos días tenían previsto organizar una “Feria de desarrollo social sustentable” para acercar a las instancias de gobierno, que son las proveen los apoyos, además de mostrar como ejemplo algunos proyectos exitosos para darles a conocer las formas de acceder a los recursos.
Para que estos proyectos sean posibles, tiene que trabajarse en la sensibilización de los funcionarios para que las mujeres tengan mayor accesibilidad a recursos de programas estatales y federales y que las mujeres jóvenes continúen sus estudios para mejorar su condición de vida.
Otro de los fenómenos que endurece la situación de las mujeres en El Llano es el nivel de migración, además de ser uno de los municipios de Aguascalientes que vive una situación marginal. Así es como ve la situación Wina Rosas, asesora municipal de desarrollo rural en El Llano.
Confirmó que las posibilidades de empleo son pocas y que las mujeres que logran tener un trabajo lo consiguen en fábricas instaladas en Aguascalientes, lo que para ellas implica trasladarse todos los días; a su vez tienen que estar fuera de su casa con todo lo que eso implica para ellas, como dejar a los hijos en el mejor de los casos con un familiar o amigo pero la mayor parte de las veces tienen que cuidarse entre ellos mismos.
Al preguntarle a Wina sobre los niveles de migración, dijo que otro gran problema del municipio es no contar con información estadística que les permita identificar los problemas no sólo de manera cualitativa o por lo que ellos aprecian en el ambiente; de acuerdo a esta dinámica, una de cada tres mujeres tiene un familiar que va y viene a Estados Unidos, en la mayoría de los casos sus parejas; ellas viven del dinero enviado y cuando éste no alcanza por como se ha dado la crisis, ellas acuden a pedir algún apoyo.
Anteriormente sí se daban apoyos para las mujeres que lo solicitaban; sin embargo, no había una estructura pensada bajo una perspectiva de género para darle herramientas para que se vuelva un ejercicio continuo y no solamente una cantidad de dinero proporcionada en una sola emisión, que les sirve más para comer que para hacer un negocio.
Por otra parte está también el escepticismo de las personas que han participado anteriormente en otras convocatorias sin ver resultados claros de apoyo, por lo que entonces cualquier convocatoria que vaya lanzarse ahora debe estar pensada para garantizar ciertas consideraciones que son de vital importancia para ganarse nuevamente la credibilidad de los ciudadanos y en particular de las mujeres.
