Aguascalientes ha eliminado entre sus posibles factores de recuperación el endeudamiento público, mencionó el senador panista por Aguascalientes, Rubén Camarillo Ortega al señalar que en base a la información con la que cuenta el sexenio de Felipe González dejó una deuda de 300 millones de pesos, mientras que la administración de Luis Armando Reynoso Femat, ha incrementado este monto “10 veces más, aproximándose a los 3 mil millones de pesos”.
Camarillo Ortega especuló en que el escenario para el 2010 en materia presupuestal será complicado pues para empezar existe el pendiente para pagar 225 millones de pesos sólo para liquidar los intereses. Subrayó que esta es una deuda que se ha ido adquiriendo con el tiempo y que a largo plazo hay una mala planeación que perjudicará en definitiva a los programas sociales.
Los 3 mil millones de pesos que calculó existen en la administración estatal como deuda, no incluyen los empréstitos de los municipios quienes también están incluidos en un estado “quebrado”, financieramente hablando.
Anticipó que Aguascalientes sufrirá demasiado por el sobre endeudamiento que presenta en sus finanzas públicas, ante esto “hubo poca prudencia” para poder tener una estabilidad en los estados financieros públicos.
Otro de los problemas, puntualizó, es que los ciudadanos no entienden dónde es que se encuentra la deuda pública, señalando que en días anteriores el gobernador del estado habló de unos terrenos que podrían ocuparse para la refinería, lo que a su parecer es una señal de que se están comprando predios que no son utilizables para proyectos centrales.
El senador mencionó que el paquete económico del 2010 comenzará a discutirse esta semana en la cámara alta donde deberán de ajustarse a los 400 mil millones de pesos que existen del boquete fiscal a nivel nacional.
Para poder resarcir un daño que desde el punto de vista del senador es irremediable con deuda, hay tres opciones que podrían beneficiar a las arcas públicas, en primer lugar habría que implementar una reducción en el gasto en los tres órdenes de gobierno donde se canalicen los recursos ahorrados a proyectos estratégicos que no incluyan “construcciones de estadios”.
En segundo lugar debe de replantearse un incremento de ingresos por parte del gobierno federal en el que hay dos posibilidades, una de ellas es generar mayores impuestos a los mismos contribuyentes o la segunda es la amplitud en la cobertura del pago de gravámenes. Aquí subrayó que no se encuentra a favor de una imposición al consumo en medicinas y alimentos.
Por último, había que asumir una deuda, pero para esto es necesario tomar en cuenta los recursos que se necesitan para poder liquidar en tiempo y forma el empréstito. Dijo que para poder tener resultados más objetivos y eficientes habría que recomendar una combinación de las tres propuestas.
En un encuentro sostenido con los medios de comunicación en su casa de gestión, Camarillo Ortega mandó un mensaje claro a Reynoso Femat y le pidió que diera soluciones a sus peticiones mediáticas, convocando en que cualquier aclaratoria la haga el mismo gobernador y no a través de sus funcionarios.