Aunque la reconversión de procesos en las empresas para reducir el impacto ambiental puede ser cara y un poco complicada, hay otras acciones que éstas pueden llevar a cabo, aseguró Alfredo Alonso Ruiz Esparza, empresario que ha ocupado cargos públicos encaminados a la protección ambiental en los tres niveles de gobierno, y que cuenta con amplia experiencia en las consultorías para que las empresas sean más ‘amigables’ con el medio ambiente.
Entrevistado por La Jornada Aguascalientes luego de que, en el marco de las celebraciones del Día Mundial del Medio Ambiente, el secretario de Hacienda, Agustín Carstens pidiera a los empresarios que conjunten el negocio con el cuidado ambiental, Ruiz Esparza comentó que el principal problema para las empresas, es que hacen falta instrumentos de apoyo económico para el sector empresarial que sean más accesibles.
Explicó que esto significa que, aunque hay varios empesarios que están interesados en entrar en la cuestión de cuidar el medio ambiente y combatir el cambio climático desde su propia empresa, “como el invertir en aspectos ambientales te genera un valor a mediano y largo plazo, ahorita con la coyuntura económica, es difícil que el empresario le apueste a la reconversión de sus procesos para que sean más amigables” si no vienen con impulso financiero por parte del gobierno.
Indicó que estos impulsos pudieran darse a través de incentivos fiscales que motiven que los empresarios participen cada vez más en estos temas; agregó que en el tiempo en el que estuvo a cargo de la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proespa), le tocó ver empresas que contaminaban no porque así lo quisieran, sino porque sus procesos productivos ya se encontraban totalmente deteriorados, pero que sin apoyos gubernamentales y en época de crisis, es complicado que arreglen esta situación.
Sin embargo, comentó que se le debe dar mayor énfasis a la concientización, porque “algo en lo que sí pueden empezar los empresarios, es en hacer sus compras verdes”, lo cual significa que adquieran sus insumos de manera amigable con el medio ambiente, que sean producidos por industrias certificadas con el sello ISO 14000 (norma de gestión ambiental) o la certificación ‘Industria Limpia’, entregada por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, lo cual “sería un buen comienzo”.
Señaló que la reconversión de procesos podría ser la solución más completa, propiciando una reingeniería que no sólo se aboque a controlar la contaminación, sino que desde origen, se pueda evitar la misma.
Apuntó que mientras más pequeña sea la empresa, es más sencillo hacer esta reingeniería, agregando que en caso de empresas muy grandes, en las que sería imposible cambiar todos los procesos, una opción es la compra de bonos de carbono, modalidad popular en Europa, por la cual, compañías que ya no pueden disminuir sus emisiones de dióxido de carbono, pagan para que nuevas empresas que se van a instalar, desde un principio consideren bajas emisiones, y así se pueda compensar sus niveles.
Agregó que, aunque Aguascalientes es reconocido como un estado sobresaliente en cuanto a cuidado ambiental tanto a nivel gubernamental como empresarial, a 20 años de la publicación de la Ley de Equilibrio Ecológico del Estado de Aguascalientes, se esperaría que los resultados fueran más palpables, por lo que hizo la invitación a que se incremente el nivel de conciencia entre los sectores productivos, y no caer en el conformismo.
Señaló la importancia de esto porque en el largo plazo “el proteger y cuidar el ambiente da más competitividad como región, que es a beneficio no nada más del sector gubernamental, sino del empresarial”, por lo que invitó a que se cree una sinergia entre las ONG’s que promueva un desarrollo más sustentable.
Por último, reconoció la labor de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) –licenciatura en ciencias ambientales- y del Instituto Tecnológico de Aguascalientes (ITA) –ingeniería química ambiental- que están creando profesionales que ayudarán al sector empresarial y gubernamental en la mejora para la creación e implementación de políticas públicas en materia ambiental.