nochece el mundo es un libro que se presentó este miércoles 27 de mayo del año en curso en la colonia Condesa de la capital del país. La obra fue realizada por Agustín Lascazas y se publica con el sello editorial de ‘Ediciones sin nombre’. Dado que no tengo aun el documento en mis manos, simplemente les adelanto que, de acuerdo a la ficha que viene en la invitación, Anochece el mundo es concebido como un texto extraño y anómalo, pero también normal y natural. La misma reseña indica también que un eje central del trabajo, es el humor y la ironía, y concluye que se trata de una obra en la que la angustia se convierte en fiesta, y al revés.
La noticia no tendría ninguna importancia a no ser por tres detalles. Primero, se trata de un texto escrito por un amigo personal. En segundo lugar, la presentación se llevó a cabo en el Distrito Federal y, finalmente, aborda un tema nocturno en el que la noche es concebida como destino. Cada detalle de esta trilogía merece un breve comentario que comparto con los lectores de La Jornada Aguascalientes, y lo hago pensando que posteriormente habrá la oportunidad de conocer las reseñas críticas sobre el contenido del libro, reseñas que ojalá y vengan de los expertos en la materia.
Sobre Agustín, manifiesto que compartimos una amistad sincera que se distingue por el aprecio de algunas afinidades y el respeto por diferencias políticas y también deportivas que ahora no vienen al caso. A lo que voy en este momento, es que veo en él una capacidad muy especial para observar el mundo, y que seguramente proviene de su formación académica, pero también de una preocupación personal que dirige la selección de sus lecturas, amigos y hábitos, este perfil marca, claro está, también el destino de sus opiniones e inclusive de las puntos de vista más triviales. Es un hombre sin fronteras al que vale la pena leer y, si es necesario criticar, pero nunca ignorar. Esperemos el libro y hagamos nuestra parte como lectores.
La presentación es en la Hipódromo Condesa. Una colonia de los años veinte o treinta que desde entonces se ha distinguido por tener uno de los ejemplos más notables del Art Decó y hoy por hoy, un sitio de entretenimiento y bohemia muy socorrido por los capitalinos. Es un lugar en el que se respiran las ganas de charlas y comer, y un centro de reunión de artistas y pensadores que radican en la capital del país. Se me ocurre que este es un marco apropiado para presentar el libro de Agustín y hacerlo con atención a los comentarios que realizarán Eudoro Fonseca y José María Espinasa. Una jornada que se opone a la costumbre de traer presentadores hacia Aguascalientes, y que ahora, ante hidrocálidos y chilangos, y en medio de una noche mundana, sólo habrá ecos inevitables de Termápolis.
Sobre el tema nocturno qué puedo decir. Es un tema tan recurrente como inagotable. La noche, que según Goethe, es mitad de la vida y quizá la mejor mitad. La noche que es ausencia de luz, refugio de confesiones, cómplice de imposibles, paraíso de olvidos y ahora musa de un loco que necesita pequeñas dosis de cordura para respirar más noche. El manto nocturno que alienta el optimismo de Gibrán cuando decía que detrás de cada noche vive una aurora sonriente. Ojala que este jueves podamos decir que la presentación se llevó a cabo sin novedad y que pronto se repita la presentación en alguna otra noche de esta ciudad.