Ya como integrante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), José Narro Céspedes, líder de la Unidad Democrática Nacional que pertenecía al Partido del Trabajo (PT), confirmó que la vía en la que se encuentra el partido con el que antes comulgaba, es definitivamente la pérdida de su registro.
A pesar de que a su criterio los militantes petistas están realizando la mayor lucha por seguir en la lista electoral, consideró que “en muchos estados como Aguascalientes y Zacatecas no existe el PT”.
Al recordar sobre su separación del PT, aseguró que hasta el momento, no se ha olvidado el problema sostenido con Alberto Anaya, presidente nacional del instituto político. Lo acusó de estar creando un partido con intereses particulares, que busca el poder por el poder cuando crea alianzas con el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
“Nosotros no podemos seguir fortaleciendo un proyecto que se diga partidario democrático cuando hay una persona que tiene 20 años en el poder”, agregando que el PT se alejó de la lucha popular y de masas, “está viendo nada más de quien se cuelga para alcanzar su registro”, tachándolo de un plan dependiente del priísmo.
Vio una simulación que no debería de consolidarse, pues perdió viabilidad en el sentido que buscan los mexicanos. Confesó que aún sigue militando en el partido y que el proceso de incorporación al PRD sigue en marcha.
En la conferencia, donde acompañó al presidente nacional del sol azteca, fue enfático al considerar que una de las alternativas para el país “es y será“ un proyecto de izquierda, en el que las ideologías que han compaginado en otros países, puedan impulsar nuevas políticas que representen los intereses de la ciudadanía.
Considerando que la población mexicana, está deseosa de contar con un grupo político que represente las necesidades sociales y que pueda reflejar las peticiones de los distintos sectores; a su decir, deben dejarse de lado las diferencias políticas para poder enfrentar en las urnas al PRI y al Partido Acción Nacional (PAN).
En su opinión el PAN ha fracasado también por sus distintas incapacidades y de “impulsar y hacer crecer la corrupción, además de que el PRI dejó al país en la bancarrota, inundado de impunidad”.
Reparó sobre el desempleo y la caída de la economía, considerando que estos factores son también indicios de la necesidad de un cambio inminente, en específico, la opción de izquierda que “como se está viendo en América Latina, la alternativa es a la izquierda y tiene que ver con la necesidad de construir un apis con justicia, equidad y libertad democrática”.
A pesar de la crisis que vivió la izquierda el año pasado, confió en que el consenso de los grupos políticos de izquierda llegue y se fortalezcan procesos unitarios, pues “ante este gobierno incipiente de Felipe Calderón y un PRI que aspira a gobernar bajo los mismos usos y costumbres, como los asesinatos y la impunidad”, el requisito indispensable es la consolidación del PRD, aseguró.
Subrayó que la corriente que lidera a nivel nacional tiene una inserción paulatina a las filas del PRD, esto mediante la ocupación de algunas candidaturas de mayoría relativa y otros más que colaboran en la persuasión de los ciudadanos.
“Hemos recibido un trato cálido y fraterno del grupo perredista”, argumentando que estos trabajos vienen a fortalecer los lazos para la construcción de un polo de izquierda, en el que realmente haya aspiraciones para disputar el poder político de México, generando entonces un cambio.