La Comisión de Equidad de Género, Social y Humana, de la sexagésima Legislatura, convocó a la segunda reunión del parlamento de mujeres de Aguascalientes, en la que se reunieron legisladoras locales, federales, invitadas especiales, activistas sociales, representantes de asociaciones y mujeres en general que se dieron cita en el recinto legislativo.
El objetivo de este encuentro fue principalmente hacer visible el trabajo que hasta ahora se ha realizado. Nora Ruvalcaba lo definió en palabras muy concretas: la labor consiste en preservar, afrontar y denunciar; labor que está destinada no sólo para ellas, sino para todos y cada uno de los miembros de la sociedad.
La primera parte de la ceremonia fue la bienvenida del diputado Francisco Javier Guel Sosa, en su carácter de presidente del Poder Legislativo, el protocolo de honores a la Bandera y el canto del Himno Nacional. Enseguida se dedicó la tribuna a las mujeres, dieron el uso de la voz a la diputada Beatriz Santillán y a cada una de las mujeres representantes de las diferentes fracciones partidistas.
Las mujeres que engalanaron la tribuna, portaron con todo honor cada uno de los lugares ocupados, pues detrás de cada una de ellas hay largas historias de trabajo para erradicar la violencia, la discriminación. Aunque los triunfos que hasta ahora se tienen, siguen sin ser suficientes para festejar. Todas coinciden en que falta un camino muy largo para recorrer.
Las diputadas, en representación de los partidos del Poder Legislativo, hicieron sus respectivos posicionamientos en cuanto a las mujeres y los retos por cumplir en los días venideros.
Al final de cada una de las ponencias, se organizaron cuatro mesas de trabajo en las que se trataron temas diversos relacionados con las principales problemáticas que aquejan a las mujeres: violencia, discriminación, desigualdad, falta oportunidades para el desarrollo, discapacidad, temas sexuales, educativos y demás.
Se trataron temas como el apoyo a las mujeres que trabajan en las maquiladoras, los paros técnicos y los efectos en la economía de las familias; se habló del aborto en los casos de violación y la coordinación que debiera existir entre las instituciones involucradas con el tema. Se propusieron cambios en torno a la legislación que son necesarios para la protección de las mujeres violentadas, puntos relacionados con las consecuencias de la no acreditación del examen de evaluación del Ministerio Público.
Revaloración del trabajo doméstico como digno para recibir una compensación de parte del cónyuge, solicitaron que el DIF dejara de ser sólo una oficina de la esposa del presidente, para que sea una dependencia realmente enfocada a las necesidades de los grupos que están en situación de vulnerabilidad y la situación de las mujeres en los reclusorios, donde requieren de un trato especial porque son mujeres y en casos muy especiales, como las embarazadas o quienes incluso han tenido hijos dentro de los CERESO.
Las mujeres que subieron al presidium para presentar las conclusiones de cada una de sus mesas fueron Roxana D´Escobar, de la Fundación Mujer Contemporánea; Mónica Pedroza, del Centro de Capacitación para el Desarrollo; Marcela Martínez, del Instituto Superior de Educación Sexual; y la regidora María Esther Pérez Pardo.