Los vecinos de la colonia Los Sauces ya están viviendo las consecuencias de tener cerca una planta de tratamiento que no cumplió con el proyecto inicial que a ellos les ofrecieron, donde les aseguraron que no habría olores desagradables ni movimientos que les causaran algún problema.
Hace cuatro años que la planta está en funcionamiento y desde antes de que iniciara, aún con las promesas de las autoridades, los vecinos no estaban de acuerdo.
Según comentaron, solicitando el anonimato por temor a represalias, no pudieron hacer nada para detener la instalación, ya que los miembros de la Sociedad Cooperativa, que son sólo 150 de los 450 vecinos de la zona, vendieron el terreno sabiendo de antemano cual era la finalidad de este espacio.
Durante seis meses que duró la construcción, los vecinos se vieron obligados a adecuarse a las condiciones, ya que por el mismo movimiento se generaban enormes cantidades de polvo que cubría todo alrededor.
Uno de los aspectos técnicos que iba a permitir que no hubiera malos olores era que para tratar el agua no se utilizarían químicos; sin embargo, una falla de último momento hizo que esta opción fuera inevitable, empezaron a usar estos productos y de manera casi automática las plantas y árboles que estaban alrededor sufrieron las consecuencias; los vecinos aseguraron que la calidad de vida de la vegetación de alrededor disminuyó y los vecinos empezaron a tener ciertos problemas de salud, que ellos relacionan con la llegada de esta planta de tratamiento.
Eso sin contar con los malos olores que, se dijo, pensaban evitarse. En realidad eso no sucede, y es una situación muy molesta que ellos tienen que vivir de manera constante; algunos días se percibe más que otros pero es finalmente una constante.
Otra de las violaciones de la que dieron cuenta los vecinos, es la distancia a la que se colocó la planta, pues esta totalmente pegada a las casas habitación e inicialmente les habían dicho que iba a ponerse al otro lado del canal, pero finalmente quedó ahí, a un lado de sus hogares.
"Ellos ofertan cosas maravillosas con las plantas de tratamiento, pero sería bueno saber si de verdad se está aprovechando; además, no sería necesario perjudicar a los ciudadanos", adujeron.
Por su inconformidad, han buscado constantemente a las autoridades y no las han encontrado, y cuando en alguna ocasión le pidieron el apoyo al presidente municipal, él se desligó argumentando que esa planta es responsabilidad de Gobierno del Estado.
Cuando han tenido un acercamiento con las autoridades les dicen que van a arreglar los problemas, pero sólo son paliativos momentáneos y los problemas regresan posteriormente.
Los vecinos no buscan ya que cierren esa planta de tratamiento, pero sí quieren que se mejoren todos los desperfectos que se da en el funcionamiento, porque ese es el lugar en el que viven con su familia, es su patrimonio.
Una situación similar fue la que vivieron los vecinos de Vistas de Oriente, con la diferencia de que el proyecto de la planta de tratamiento de esta otra colonia sí estaba a cargo de CCAPAMA, es decir del municipio, y éste ha respondido, comprometiéndose a que serán sólo tanques de almacenamiento.