Sin entender y como siempre - LJA Aguascalientes
23/02/2025

Cómo existen personas que no logran entender cuando sus condiciones cambian, y se empecinan en mantener sus características históricas de comportamiento a pesar de que no se encuentran ubicados en los mismos lugares que les son tan conocidos. Y qué ruin que pretendan ungirse en francotiradores, cuando en su pasado reciente, siempre alertaron a quienes los trataban como la pieza favorita de la caza, y se decían marginados de los esquemas de toma de decisiones, manifestando que su condición de oposición, los hacía vulnerables del partido hegemónico.

Cuando muchos esperábamos que el Partido Acción Nacional se empezará a comportar como el partido en el Gobierno Federal, y no de la manera en que lo ha venido haciendo durante los últimos años, como una oposición que nunca supo llegar y que ahora no se quiere ir, sin saber para qué se quiere quedar; y en este proceso político electoral, se ha reducido a buscar la manera de aminorar la diferencia entre el candidato del PRI a la Presidencia de la República (hasta ahora amplio favorito) y su desangelada candidata, que de vez en vez pierde los estribos, y con base en amenazas de que algo le tienen preparado a Peña Nieto, sin entender que la ciudadanía estaría esperando que el partido en el Gobierno Federal presentará propuestas soportadas en los supuestos éxitos de las dos últimas administraciones federales, que han sido de la alternancia, cuando pudieron ser de la transición.

Es verdaderamente aberrante ver las escenas que han mostrado los panistas en las recientes semanas, su propuesta se reduce a decir que Peña Nieto miente, que no cumplió con los compromisos que el priísta dice haber cumplido, cuando fue gobernador del Estado de México, y así han perdido irremediablemente las últimas semanas. Qué lamentable ha sido verlos actuando como oposición contestataria cuando al menos en los próximos siete meses seguirán ocupando Los Pinos y Palacio Nacional; hablan de derroche económico en la campaña del priísta, y tienen a sus delegados federales actuando como porros en los estados donde gobierna el PRI, usando vergonzosamente los padrones de los programas federales, y tratando ridículamente de bloquear los eventos de Peña Nieto, citando a los beneficiarios de los mismos programas, a entregas extraordinarias en los días en que el priísta visita cualquier estado de la República, con el afán de evitar que la gente concurra a los mítines del PRI.

De nueva cuenta aparecen como actores predilectos de la Rebelión en la granja, y quieren destronar a cualquiera que en el pasado hayan criticado por trampas parecidas a las que ellos han logrado empeorar. Sin entender que la ciudadanía se cansó de contabilizar los muertos de la “guerra de Calderón” y de los malos chistes del jefe del Ejecutivo federal, que aún no ha podido saciar su hambre, por ridiculizar y vejar la figura presidencial, se engallan y presionan al mismísimo antecesor de Calderón, para que rectifique su dicho sobre la virtual victoria de Peña Nieto, y se quieren fabricar su “milagrito”, a expensas de la incipiente democracia mexicana; ya que si los mexicanos hemos soportado que nos vaciaran de contenido la palabra cambio, y seis años después permitimos que los poderes fácticos decidieran por nosotros, por qué no aceptar que se fabriquen su milagro para detener al candidato priísta.

Cada día que pasa en este proceso político electoral, me levanto esperando que los panistas puedan entender que la ciudadanía no les va a soportar que de nueva cuenta quieran polarizar a la sociedad, y que vuelvan a esgrimir sus conceptos trasnochados de “la amenaza para México”, y que le hagan caso al famoso pero poco ético asesor español, que como buen falangista pretende escenificar las escenas tan recurrentes de la dictadura franquista, para reproducir sus éxitos mediáticos, que poco le valen, ante una sociedad donde se recuerda con cariño a los republicanos españoles que tanto le abonaron a nuestro país, y donde nos estamos cansando de sus mensajes fascistoides que sólo gustan a los intolerantes.

El daño que este mesiánico franquista le produjo a la sociedad mexicana fue muy grave, y nos costó mucho recuperar un nivel de aceptación a las ideas diferentes de las nuestras. Todos debiéramos estar preparados para lo que este pequeño Goebbels se encuentre “cocinando” para los debates entre los candidatos a la Presidencia de la República, y pedir a quienes van a debatir que lo hagan con limpieza y honestidad, hacerlo de la manera contraria, denostando y vilipendiando al adversario político, sería tanto como aceptar que no estamos preparados para quietarle el adjetivo incipiente a nuestra democracia. La lucha que muchos han dado en sus partidos por alcanzar un mejor nivel de militancia, sería olvidada si nos prestamos a ponderar de los candidatos presidenciales la descalificación, la diatriba y el insulto.

Exijamos a los candidatos a la Presidencia de la República, que nos presenten proyectos de nación, que contrasten ideas y propuestas, que dignifiquen la actividad político partidista, tan mal valorada y con razón por los ciudadanos de este país; si no los forzamos a que se comporten de una manera decorosa, estaremos condenando nuestro poco espacio para la reconsideración como nación. Hemos perdido mucho tiempo en estupideces, y la vida como país, nos lo está cobrando, ya no hay mucho espacio para retomar el rumbo, hagámoslo ya, si la política es la actividad por excelencia del ser humano, pidámosle a quien se llama político que la dignifique, y si no, que no se llame lo que no es.

En los debates entre los candidatos a la Presidencia de la República, queremos ver honestidad y ética, si no están dispuestos a hacerlo, mejor que no nos quiten el tiempo.



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