- En todo el país se tenía el conocimiento del problema y las autoridades negaron la relevancia del problema
- Su objetivo es alertar a los tres gobiernos y tres poderes del estado para intervenir con medidas de emergencia de género
“La Alerta de Violencia de Género se me ocurrió en un insomnio terrible tras el estudio de feminicidio en todo el país”, subrayó Marcela Lagarde y de los Ríos, exdiputada federal y académica feminista, quien creó este mecanismo de emergencia en 2007 para enfrentar y buscar la erradicación de la violencia feminicida en un territorio determinado.
La especialista en estudios de género detalló inventar el mecanismo tras su desesperación por los resultados de la investigación sobre feminicidio en todo el país, “era trágico todo lo que veíamos”, en un principio se analizaron diez estados y en ninguno se encontraron estrategias para combatir los asesinatos de mujeres por odio; se percataron de lugares como Juárez, Estado de México, Guanajuato y Oaxaca donde se tenía conocimiento del problema, pero las autoridades actuaron con la negativa de la relevancia del problema.
Ello causó una gran impunidad que se paga todavía porque hay cientos de familias que no han sepultado a sus hijas, madres, tías sobrinas, hermanas y cada vez hay más mujeres violentadas hasta la muerte; todo está pendiente y las autoridades no han cumplido con su obligación de atenderlo.
“Pensando en qué hacer para que entiendan, para sacudir la conciencia de quienes toman decisiones, se me ocurrió que así como hay alarmas por inundaciones, huracanes y demás, que son de protección civil, por qué no crear una de protección civil para las mujeres”. Así fue como se creó esta Alerta de Violencia de Género, con el objetivo de alertar a los tres gobiernos y tres poderes del estado para que intervengan con medidas de emergencia de género, en los focos rojos de violencia de género.
Por un lado están los gobiernos y por el otro la sociedad civil; la académica destacó que primero tienen que ser escuchados, pues han pasado años desde que organizaciones civiles exigieron que se declare la Alerta en sus entidades, sin la respuesta favorable de los tomadores de decisiones. Por ejemplo, para diciembre del 2010, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos solicitó una investigación sobre la procedencia de la Alerta para el Estado de México, manifestándose que del 2005 hasta el mes de agosto del 2010, habían ocurrido 922 feminicidios; pero un mes después, el Sistema Nacional para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres presentó la improcedencia de la investigación y la petición fue desechada.
Hasta el 2013 se señalaba que de las seis solicitudes promovidas por organismos de la sociedad civil, para entidades como Guanajuato, Estado de México, Nuevo León e Hidalgo; los resultados de las votaciones de la Comisión y del Sistema negaron la petición de aplicación del mecanismo. “Tienen que entender que se trata de un mecanismo para gobernar mejor, no se trata de acusar a nadie sino de llevar un mecanismo real de gobernanza a favor de las mujeres”.
Todas las sociedades deben ser informadas de manera permanente sobre el plan de emergencia que se tomará en las entidades federativas, municipios o barrios; pues se aclaró que la Alerta es cien por ciento territorial no de aplicación general para todo el país. Si un determinado territorio se declara en Alerta de Violencia de Género, sólo aplica para ese espacio determinado no en sus colindancias territoriales.
“Justo esa es la búsqueda para la mejor gobernanza, y hay que decirlo, a todos nos sorprende que este gobernador del Estado de México por fin tome la riendas y haya solicitado la declaratorio de Alerta”, para la investigadora es un hecho histórico, pues fue de las entidades que más rechazó la idea de este mecanismo; se celebra que se haya comprendido que no le pasará nada negativo a la entidad ni a su gobierno, sino por el contrario le permitirá acceder a recursos, financiamiento y transformar instituciones, para enfrentar la violencia de género y proteger la vida de las mujeres al garantizar el respeto de sus derechos humanos.
Si la Alerta se aplica adecuadamente va a beneficiar a todo el país, pues creará confianza y seguridad en las instituciones gubernamentales, y el país atendería a uno de los peores problemas conocidos mundialmente en materia de derechos humanos y seguridad de género.